[Una pequeña vuelta de The Young Writer al ruedo de los Gallardos]
- No lo sé
mi amigo - comentaba The young W. a su compañero entrañable, mientras encendía su pipa
con The Shire tabac -. En verdad no lo sé... pues porque no hay ninguna
seguridad, pero siempre hay señales, marcas, indicios, pero no seguridad. Están
las profecías y con eso hay que contentarnos-.
El sol
en cenit brillaba poderoso sobre los dos amigos y daba vida y verdor a las
plantas y árboles de Kungsträdsgården que despertaban a la primavera. Había
calma por aquellas tierras, el encierro preventivo no era algo a suceder, pues
los habitantes del país eran reacios al encierro.
- Mas si
algo llama la atención, es el movimiento sincronizado y ordenado, coral, de
casi todos los pueblo del orbe. Todos a una han tomando las mismas decisiones,
un mismo pensar, un mismo proceder, y eso inquieta.. -siguió el joven la charla
que había dejado entre pitadas y humaredas ruludas.
- Bueno,
si, mi amigo, si, si. Pero también hay que tener en cuenta la cuestión
sanitaria! -bramaba exaltado Bernardo-. Los muertos! Dios mío! Crecen por
doquier, la Hispania está diezmada de casos y Italia también. Hay cadáveres, en
calles, cadáveres en hospitales, cad..-
- Cadáveres
en hospitales seguro -lo interrumpió con risa the young-.
- Claro, sí, ¡pero es la cantidad! Y tu lo sabes bien. Hum.. muertes han habido siempre,
y los habrá. Memento Mori.. memento Mori.. -susurraba ya en silencio y absorto
mirando unos niños que patinaban en la pista de hielo sobre lo que fuera una fuente-.
- ¿No te
vienen a la memoria tantos libros y lecturas? ¿1984, El Señor del Mundo, Su
Majestad Dulcinea, Rebelión en la Granja, Un mundo feliz? No es fácil no
asociar nuestra vida moderna y contemporánea con algún suceso, diálogo o
capítulo de esos libros. Es más, es como si esas asociaciones brotaran por si
solas. Veo mano demoniaca, en todo esto, ya con un poder inconmensurable..-
- Hace
tiempo que lo estoy rumiando. Si y.. no. Bueno más bien que si! Pero algo me
dice que no.. No sé. Young, enfermedades y pandemias han existido siempre, y
existirán. Los virus mutan, esas partículas a-vitales cambian, no es nada nuevo
desde que el mundo es mundo. Y también es sabido que los virus se crean, se
comercian, se investigan, y salvan vidas! No todo es morir mi amigo, no compro
ese pensamiento rápido y mojigato, mezcla de cristianismo insano que descuida
la muerte, aclarando que mientras más rápido, más cerca del Señor. Eso es
beatería!-
- Si,
coincido, pero a ver sigue.. -agregó TYW mientras relojeaba la extraña cruz que
dominaba la cúpula de la Iglesia, donde dicen que antaño oraba secretamente Cristina, La Abdicadora, antes de hacerse católica.
Y
prosiguió - La muerte la introdujo el Maligno, al igual que las enfermedades y
sufrimientos, y ese volver a la salud, al estado original, esa tarea de
contra-maldad, es un “volver” al Paraíso. No es sonsera la tarea de un médico..
Ah! cómo se ha perdido esa figura tan antigua y tan perenne del Cristo Médico..
Me fui.. volviendo, la muerte causa estragos y si te pilla en pecado y sin
gracia, ni hablar. De ahí que es bueno recobrar la salud del cuerpo para
asegurar la del alma. Pero a escalas mundiales, las tan repentinas muertes y la
renuncia de nuestros sacerdotes a salvar almas, puede que aumenten el número de
pillados sin gracia. Punto para el Demonio, pero no deja el Señor de hacer su
magia-.
- Exactamente,
andar indiferente por la gran cantidad de decesos es de personajes ignorantes,
o inhumanos si los hay.. y ahora más que nunca resuena el Memento Mori con un
rugido ensordecedor. Hay que cuidarse, de no caer en tentación, eso primero. He
oído que en algunas partes del mundo han cancelado la Misa y las celebraciones
públicas, es duro.. tiempos duros. No me animo a hacer ningún comentario, o
algún juicio, creo que ese cura de las tierras de Buenos Aires de la Santísima
Trinidad puede traernos un poco de luz. [https://www.youtube.com/watch?v=WJnZh2N0Shg]
- ¿Viste
lo que hizo nuestro cura?- celebraba exultante Bernardo.
- Si,
valiente, muy audaz. Se acordó de cuando nuestro Señor dijo de ser astutos como
serpientes, y lo puso en práctica, y tenemos Misa, Tridentina valga la
aclaración-.
- Ja! Quién lo diría, en estas tierras frías, desoladas, hundidas en siglos de
tiránico y deshumanizante protestantismo, la Misa sigue mientras nuestros
bastiones cristianos cierran.. o ponen vacunas. -ironizó su amigo sobre
ciertas fotos y noticias que llegaban desde las tierras del vino.
El banco
donde los dos personajes estaban sentados, se ubicaba en el lado Este de los
jardines. De espaldas al Mar Báltico, miraban al Oeste, al continente. a
Mälaren. El día era único, se habían acostumbrado y habían entendido que cuando
el Sol relucía en su máximo esplendor, el deber era salir a caminar. La mayor
parte de los días, las nubes celosas del norte lo tapan, o llueve o nieva.
La gente
seguía caminando por las calles, secretarias apresuradas y nerviosas corrían a entrar en
horario, madres parsimoniosas llevaban a sus hijos a los jardines y colegios,
jóvenes airosos reían en el pasto. Eran las 13:00 del mediodía y el centro de
la ciudad vibraba de vida y de una alegría inusual para ser ciudad capital. Había
paz en aquel lugar.
- Quiero
compartirte algunos pensamientos que estuve hilvanando en estos días -cortó en
seco el joven escritor mientras Bernardo imaginaba una vida en familia por
Södermalm.- Y es sobre el Anticristo, el enemigo.
- Se
calienta la charla! -agregaba rápidamente el emocional Bernardo, mientras
encendía un cigarrillo mal armado.
- Y se
calentará más en unos años! Como bien sabes, la historia tiene un curso lineal,
al menos como la entendemos nosotros los cristianos. Y desde tiempos muy
antiguos, o casi sin tiempo, o tiempo de ángel, el Demonio conoce al hombre.
Algo siempre conoció, por su ciencia que Dios le dio, y no se le quitó. Y lo
fue conociendo a través de los años, de los siglos, del pasar lento y
parsimonioso del tiempo. Fue aprendiendo a ver cómo actuaba, cómo pensaba,
cómo reaccionaba, vivía, apasionaba, soñaba.. todo tipo de movimientos. Incluso,
cómo caía. Aprendió a tentarlo. Pero hay cosas que no sabe, porque le son
vedadas. El Señor no le concedió todo el poder, todo el dominio. Por eso
tienta, y ahí conoce-.
Dio una
largas pitadas a su pipa, y mirando de nuevo hacia la Iglesia, prosiguió:
- No sabía bien quién era el Cristo, cuando nuestro Señor se hizo hombre. Y por eso le tentó. De la duda e hipótesis hizo la prueba. Y fue a ver quién era ese
personaje misterioso, era la duda quien lo carcomía por dentro. Y todos sabemos
ese magnífico final de Mel Gibson, que en La Pasión, muestra cuando el Maligno
cae en cuenta de quién era ese hombre crucificado, el Cristo, que le ganaba de
una vez y por todas la vida de las almas-.
- ¿Te
interrumpo un segundo? Primero, mirá la extraña cantidad de gente mirando el
Sol, y segundo: Vengo al hilo con cada reflexión, pero vamos, quiero relacionar
tu pensamiento con lo que sucede hoy!-.
- Calma!
Calma! Aprende un poco de los que miran el Sol, son vikingos! Y como no ven el
Sol seguido, cuando sale es una nueva maravilla que asombra, como si nunca lo
hubieran visto salir. Y así se quedan, inmóviles con una ligera sonrisa en los
labios. Y lo segundo.. te decía que el Demonio sabe muchas cosas, pero no todo.
Hay cosas que están fuera de su comprensión y visión. Y ahí está el hombre, la
providencia y el futuro..-.
The
young Writer miró a su alrededor y se asombró, decenas de personas sentadas o
paradas ,inmóviles, contemplaban el astro de Helios.
Continuó. - Por más que conozca hasta el hartazgo la monótona y siempre deducible aunque inesperada psicología humana, el
hombre puede ser impredecible. Y la providencia hace su trabajo, en guerra
admirable y vencedora contra las fuerzas del mal. Es decir que siempre el
coludo hace y rehace nuevos planes, en posición esgrimal contra otros
movimientos. Aunque no sabe el futuro, puede predecirlo, pensarlo, amarlo y
hasta inducirlo. Su trabajo, desde el grito de Non serviam eterno, se hace y
rehace en destruir la creación divina, al hombre. Su celo es el odio a Dios, y
por ello todo lo que viene del Altísimo. Ese destruir al hombre se construye en
dominarlo, y aquí viene el link con todo la temática del Covid19.
- Esto se pone
interesante -. Acotó bernardo al mismo tiempo que ojeaba un niño caerse en la
pista de patinaje.
- Su deseo más profundo es el non serviam, y si no se sirve, se gobierna. Lo quiere todo bajo
su dominio, claramente las realidades celestes le son imposibles, pero el mundo
terreno ya es suyo, él es el príncipe de este mundo. Pero va más lejos… Debe
eliminar todo atisbo de bien divino, y uno de ellos es la libertad, don celeste
dado a los hombres. Así será que para dominar a todos y en todo, deba poner al
mando de todos los hombres, al mando mundial, su persona misma. ¿No te llama
profundamente la atención los hechos actuales Bernardo?-.
Y Bernardo, absorto,
escuchó las últimas palabras de su amigo, mientras miraba pasar una pareja de
ancianos, ambos con barbijo y a distancia reglamentaria y un poco recomendada de 1,5m.- Algo, si, pero ¿qué gana el Mandinga con tener a medio mundo encerrado?-.
- Muchas ventajas quizá.. Partamos de que hace días no hay sacramentos en muchas partes del mundo, que la caridad se ha enfriado y los ancianos mueren solos y sin siquiera un abrazo o un adiós. Numerosas economías entrarán en receso, y ahí hay hambre, desorden y sufrimiento. En fin, todo lo que sea sufrir y padecer humano lo alimenta.-
- Bueno pero si es por eso, esto no se diferencia en nada a otros males, guerras, enfermedades o lo que fuera que padeció el hombre-.
- A eso estoy llegando. Algunos dicen que esto es un evento de ingeniería social. Un fenómeno de estudio y planificación a nivel mundial. Y puede ser ¿por qué no? Todo el mundo danza al mismo compás y a la misma música, con las mismas medidas y reglas, pareciera el Totentanz de Franz List a escalas globales. El mundo está preso pero lo acepta sumisamente.- Terminó su frase y miró hacia la esquina Noreste, donde curiosa es la historia, en 1973 sucedió un robo que bautizó un fenómeno psicológico, el Síndrome de Estocolmo.
Siguió. - Si te relaciono todo lo anterior pienso que el Demonio está barajando un experimento y así ir asentando las bases de su gobierno. Porque no sabía del todo cómo reaccionaron los hombres después de 5 siglo de tanta libertad, y exaltación del mismo hombre. Y lo vio.. La libertad se puede omitir con ciertas excusas, "ciertas normas y criterios para la salud de todos". Algo tiene estudiado, y se ve de este experimento in vivo, que a escala mundial ya se puede dominar un comportamiento general y común a todos, ¿Qué te parece ahora mi querido Bernardo?-.
Mas no hubo respuesta del otro lado, Bernardo absorto en los cerezos que comenzaban a nacer para la primavera escuchaba los ruidos de la ciudad. Niños, risas, cantos de pájaro, el viento del Norte. Allí había paz. Y en un segundo la brisa calmó y el Sol, radiante y majestuoso, ascua y brasa encendida, le pareció que lo inundaba de calor por dentro. Y sonrío.. con una sonrisa leve y sencilla sabiendo y repitiendo por dentro:
"in quibus visitavit nos Oriens ex alto:
illuminare his, qui in tñenebris
et in umbra mortis sedent,
ad dirigendos pedes nostros in viam pacis."
Siguió. - Si te relaciono todo lo anterior pienso que el Demonio está barajando un experimento y así ir asentando las bases de su gobierno. Porque no sabía del todo cómo reaccionaron los hombres después de 5 siglo de tanta libertad, y exaltación del mismo hombre. Y lo vio.. La libertad se puede omitir con ciertas excusas, "ciertas normas y criterios para la salud de todos". Algo tiene estudiado, y se ve de este experimento in vivo, que a escala mundial ya se puede dominar un comportamiento general y común a todos, ¿Qué te parece ahora mi querido Bernardo?-.
Mas no hubo respuesta del otro lado, Bernardo absorto en los cerezos que comenzaban a nacer para la primavera escuchaba los ruidos de la ciudad. Niños, risas, cantos de pájaro, el viento del Norte. Allí había paz. Y en un segundo la brisa calmó y el Sol, radiante y majestuoso, ascua y brasa encendida, le pareció que lo inundaba de calor por dentro. Y sonrío.. con una sonrisa leve y sencilla sabiendo y repitiendo por dentro:
"in quibus visitavit nos Oriens ex alto:
illuminare his, qui in tñenebris
et in umbra mortis sedent,
ad dirigendos pedes nostros in viam pacis."
The Young Writer
Añorado Joven Escritor, ¡qué bueno es tenerle por aquí de vuelta!
ResponderEliminarCreíamos que había guardado su pluma y cerrado su cuaderno para siempre... Pero he aquí que nos sorprende, cuando menos lo esperábamos, en un contexto complicado y extraño, compartiéndonos un diálogo acaecido en remotas tierras frías y maravillosas. Gracias por su reporte desde aquel lado del charco. Nos iluminan en estas horas sombrías. Espero que no vuelva a aparecer dentro de varios lustros...
Suyo affvo.